Dicen que no se puede reinventar la rueda, sin embargo, el equipo de diseño de Bontrager sí que ha reinventado la cubierta que va sobre ella. La cubierta de carretera R3 fue un proyecto que tardó tres años en completarse, que empezó con una revisión exhaustiva del proceso de desarrollo de la cubierta y que dio como resultado un nuevo estándar de pruebas, un compuesto de goma totalmente nuevo denominado TR-Speed y una cubierta de carretera muy superior a las demás.

Hay una cosa que el equipo tenía claro: una buena cubierta de carretera ha de ser rápida y ligera. Sin embargo, la mayor parte de las cubiertas de carretera se desgastan rápidamente y pinchan con facilidad. Es más, no son suficientemente buenas en una variedad de condiciones. Tener que cambiar las cubiertas el día de la carrera es un fastidio, pero no había una sola cubierta que aguantase mucho tiempo sin desgastarse, que fuera resistente a los pinchazos, duradera en los entrenamientos y rápida en competición.

Así que Bontrager cogió todo lo bueno de la cubierta de carretera R3 Hard-Case Lite y lo mejoró, creando la única cubierta válida tanto para competición como para los entrenamientos diarios. La nueva R3 es un 7% más rápida, un 22% más resistente a los pinchazos y un 75% más duradera. Además, está disponible en varias anchuras, cada una de ellas con un dibujo ligero en la banda de rodadura específico para cada tamaño que aporta tracción y seguridad en las curvas.

La reinvención de las pruebas

No todas las carreteras son perfectas. Así que, en lugar de probar la R3 en un tambor de acero como hacen todas las marcas, Bontrager ha creado una superficie personalizable capaz de reproducir distintas condiciones reales. Esto permitió al equipo recopilar y analizar más datos de rendimiento que nunca, lo que ha llevado en última instancia a hacer importantes descubrimientos.

La tecnología que se esconde detrás de la cubierta

Uno de esos descubrimientos fue que, incluso las cubiertas sin una banda de rodadura direccional, son de media un 10% más rápidas en una dirección que en otra. En otras palabras: la dirección importa. Y mucho. Por eso la R3 tiene una carcasa flexible de 120 TPI con una banda de rodadura direccional optimizada para rodar más rápido hacia adelante y aportar mayor velocidad.

Nueva goma

El equipo revisó el diseño de la R3 desde el principio, y retrocedió algunos pasos hasta renovar completamente el material. La R3 está hecha de un compuesto de goma TR-Speed patentado que es más rápido en el laboratorio y en una gran variedad de superficies de carretera.

Más kilómetros, menos pinchazos

Bontrager también ha mejorado la protección frente a pinchazos de la R3 añadiendo una banda de protección interna y flexible fabricada con Nylon105 fuertemente entrelazado. El resultado es una cubierta más ligera que aporta mejores sensaciones de la carretera, con un incremento del 12% en la protección frente a pinchazos, y un aumento del 75% en relación a la duración de la banda de rodadura, de manera que da la sensación de estar rodando con una cubierta nueva durante mucho más tiempo.