Con la llegada de la nueva Fuel EXe, sabemos que muchos de los habituales riders de bicicletas e-mtb se están preguntando, ¿es la Fuel EXe la bici que realmente voy a disfrutar más? ¿Es una light e-bike lo que necesito? Esta misma pregunta se la hacen también aquellos que aún no han dado el paso a las bicis con asistencia, pero que ven en la Fuel EXe una bici con la que adentrarse en el camino de las e-mtb sin perder la esencia de montar en bici.

Para aportar un poco de luz en esta cuestión, hemos entrevistado a uno de los nuestros. Iván García es responsable del departamento de Software para tiendas Ascend, y además, es un experimentado rider de enduro que, tras tres años montando en su Rail, se ha pasado a la nueva Fuel EXe. Sus motivaciones para este cambio podrían ser similares a las tuyas, así que nos fuimos a Granada para montar con él y descubrir qué le está aportando la nueva Fuel EXe.

Iván, ¿qué te ha llevado a dar el paso de la todopoderosa Rail, a la más ligera Fuel EXe?

Sentía la curiosidad por probar una bici que me permitiese seguir llegando mucho más lejos que con una bici muscular, pero cuyas sensaciones fuesen más “naturales” y parecidas a mi bici de trail no asistida. Me he dado cuenta de que esa diferencia de 35 Nm en sus motores puede parecer mucho sobre el papel, pero es sólo si compararas una Rail de 85 Nm con una Rail de 50 Nm, y esta, la Fuel EXe, es un concepto de bici completamente distinto.

Tras tres meses con la Fuel EXe, ¿qué ventajas ves en esta bici, qué te aporta nuevo?

Partiendo de la base de que la Rail es una súper bici y que he sido muy feliz con ella, la Fuel EXe me está aportando una serie de ventajas que encajan a la perfección con mis salidas por mi tierra, Granada. Aquí, en muy pocos kilómetros pasas de una larga subida por pistas, a un sendero ratonero con saltos y peraltes, o a una bajada propia de la Copa del Mundo. Venid cuando queráis a verlo 😊.

Empezaré por la ventaja más evidente, que no es el peso, sino la sensación de conducción que transmite esta bici. Tiene una agilidad nueva para mí en las e-mtb que he podido probar. La bici se siente intuitiva, estable y ¡muy, muy divertida! Esto es algo que por un lado se debe a la ligereza, la segunda gran ventaja – entre mi Fuel EXe y la Rail que tengo hay 5.1 kg de diferencia, es decir, ¡casi un 21% menos! – pero iría más allá para afirmar que tiene un reparto de pesos perfecto y centrado en la parte del pedalier, lo que la convierte para mí en una bici tremendamente equilibrada y con lo mejor de los dos mundos: la agilidad de una bici trail acústica y la estabilidad de una e-mtb con motor central.

La Fuel EXe es, además super silenciosa. Había olvidado la sensación de escuchar la naturaleza, tu respiración… y esta bici te devuelve esa sensación y te aporta bienestar, así lo siento.

Respecto a la autonomía, tenía pensado pedir el Range Extender de la batería pero la verdad, estoy haciendo rutas de 2 y 3 horas, y no echo en falta más, aunque a diferencia de con la Rail, llego a casa con la batería al límite en muchas ocasiones. No me importa porque con esta bici, a no ser que vivas en lo más alto de la ruta, la puedes llevar sin asistencia si lo necesitas sin ningún drama.

Aunque has tenido varias e-mtb, es la primera vez que utilizas el sistema de asistencia TQ. ¿Qué tal la experiencia?

Tiene un comportamiento muy natural e intuitivo, sin duda perfecto para cualquier usuario de bici de montaña que quiere dar el salto a una bici de este tipo. Para aquellos que ya han experimentado sistemas de mayor potencia, notarán que el sistema TQ no empuja de la misma manera que utilizando el e-mtb o Turbo en Bosch, sino que la asistencia se sentirá como un acompañamiento a la fuerza que aplicamos. No obstante, resulta muy fácil acceder a través de la APP Trek Central a la configuración; ahora mismo estoy haciendo cambios en los parámetros que permite modificar: potencia máxima, asistencia y respuesta de los pedales y voy anotando las sensaciones y la autonomía final. Sin duda esta se puede extender unos kilómetros más que en el set-up de origen a costa de esforzarse un poco más. La consola integrada en el tubo horizontal me parece una pasada y el display da la información que necesito. Además el mando me parece la mínima expresión, pasa desapercibido en el manillar y el tacto de los botones me parece muy agradable.

A la vista de la autonomía y la diferente concepción de la Fuel Exe frente a la Rail, ¿qué echas de menos de la Rail?

Te diría que, en mi primera toma de contacto, eché en falta el empuje. Son dos bicis completamente diferentes, y como tales, sus pretensiones también lo son. El motor de la Rail empuja de forma aplastante por lo que en subidas muy rotas o largas, con esta llegarías antes y más fresco.

En cuanto a la autonomía, en la Rail es algo que casi ni miraba. Para la mayoría de las salidas que suelo hacer, (rutas de 25 a 40 km, de unos +1000 m), solía llegar a casa con la mitad de la batería por consumir utilizando sobre todo el modo Tour. Esto es algo que personalmente me frustraba un poco, llegar a casa y no haber podido sacar partido ni a la mitad de la capacidad de batería. Con la Fuel Exe, termino también mis salidas conservando algo de autonomía, aún sin Range Extender, teniendo en cuenta que paso la mayor parte del tiempo en los modos 1 y 2 de conducción. Esperaba menor rendimiento en ese aspecto, pero me ha sorprendido que el nivel de batería aguante tan bien el tipo.

Por hacer un símil automovilístico, diría que la Rail es para mí ese deportivo de 500 CV capaz de todo y más, pero del que rara vez saco todo su potencial, mientras que la Fuel EXe es como ese GTI compacto de 200 CV del que disfrutas en todas las situaciones, tanto cuando quiero sacar todo su potencial, así como en el uso diario.

Iván, ¡gracias por compartir tus experiencias con nosotros! ¿Un último mensaje?

Siempre he tenido la duda de con qué bici me quedaría si tuviese que elegir entre la acústica y la e-mtb… Por fin puedo mojarme y decir que esta sería mi bici única.

Fotos: @alecubino